Es una de las obras maestras del estilo plateresco español. Fue
encargado por los Reyes Católicos al maestro Pedro de Larrea para la
orden de caballeros y frailes de Santiago, y en su ejecución
intervinieron Martín de Villarreal y Juan de Orozco.
El balcón central de la fachada es obra barroca posterior.
La parte situada entre el pórtico central y el río fue realizada en el
siglo XVIII por Juan de Rivero y Martín Susniego, con tan extraordinaria
fidelidad a la terminada anteriormente que da la sensación de ser obra
de una misma época.